Sinopsis:
Elise Rainier (Lin Shaye) acepta a regañadientes utilizar su capacidad de ponerse en contacto con los muertos a fin de ayudar a una adolescente (Stefanie Scott) que se ha convertido en el blanco de una peligrosa entidad sobrenatural.
Opinión personal de Rain Cross:
La tercera entrega de la saga Insidious no es una secuela, y es que estamos ante una precuela, ya que lo sucesos que vemos en ella pasan antes de que el demonio rojo y la anciana atormentaran a los Lambert. Y es que ya era hora de que dejaran a esa familia descansar en paz.
Ruidos y golpes en techo y paredes, grietas que aparecen de repente, objetos que se mueven en la oscuridad, y un hombre con máscara de gas que atormenta a la protagonista en mitad de la noche son los ingredientes elegidos en esta ocasión para asustar al espectador. Y consigue que demos más de un salto en el sofá.
Aquí nos reencontraremos con Elise (Lin Shaye) y sus dos “antiguos colegas”: los carismáticos Specs (Leigh Whannell) y Tucker (Angus Sampson), asiduos a la saga, y siendo el toque cómico de la misma. Son de agradecer los minutos que se dejan ver en pantalla.
También volveremos a ver viejas caras de las anteriores, pero no os voy a desvelar las sorpresas.
La película da lo que promete: escenas de terror y continuidad con las anteriores, o mejor dicho, con los posteriores films, ya que vemos cómo se forma el equipo de Elise y sus dos ayudantes, y hace referencia a la familia Lambert al mencionar el caso de Josh de niño.
Los personajes me han gustado, destacando a Lin Shaye, que lleva todo el peso del film al interpretar a una Elise diferente a lo que habíamos visto antes: una mujer atormentada y deprimida, con miedo a utilizar su don por culpa del fallecimiento de su marido un año atrás y su intento de ir al mundo de la oscuridad en su busca. A lo largo de la cinta vemos su evolución y, finalmente, se convierte en la vidente afable y fuerte a la que estamos acostumbrados.
Stefanie Scott cumple como la joven sufridora de un demonio acechador, y el resto del reparto apoya las interpretaciones principales haciéndolas convincentes.
El demonio de esta entrega puede que sea el malvado más flojo de las tres cintas, si bien en sus apariciones puede inquietarnos (y es que, si añadimos a la caracterización el sonido de alguien a quien le cuesta respirar, lo mínimo que provoca es que nos estremezcamos ante su presencia).
El director, Leigh Whannell, bebe de Wan en cada escena, aprovechando la oscuridad en los momentos clave, y ayudándose de los efectos de sonido para sobresaltar al espectador.
Puede que su mayor error resida en el guión. A pesar de ser el mismo Whannell el encargado de toda la saga, es algo más light que los demás, sintiendo que falta algo, y haciendo un final más edulcorado que de costumbre.
A pesar de este punto, estamos ante un film con el que todo amante del terror va a disfrutar, en mayor o menor medida, y que seguro consigue que des más de un respingo en el asiento.
En resumen, Insidious Capítulo 3 me ha parecido una película que, aunque no llegue al nivel de sus antecesoras, es de lo más entretenida y con algún que otro buen susto.
Por cierto, atentos al cameo de James Wan en la primera parte de la película.
Lo Mejor: Seguir explorando el universo Insidious. Elise, Specs y Tucker.
Lo Peor: Me pareció algo inferior a la historia de los Lambert.
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